POR EL PROCESO DE REFUNDACION DE IU
Antes de que sea demasiado tarde....
1.-Gaspar Llamazares ha manifestado su desconfianza en el proceso de la IX Asamblea, teniendo en cuenta las deficiencias habidas en la elaboración del censo de afiliados/as y la falta de consenso existente entre los miembros de la llamada “Comisión Unitaria”. Es decir, la falta de garantías democráticas básicas y el clima de confrontación que se vislumbra, anuncian una IX asamblea que no va a servir posiblemente para superar los problemas existentes...
2.-Todo ello, incluso admitiendo que los censos actuales aprobados han mejorado en su fiabilidad y que el trabajo de la Comisión Unitaria ha sido excelente hasta donde han permitido las circunstancias existentes.
3.-La mayoría de las propuestas, manifiestos o documentos que se presentan para el debate en esta IX asamblea, reconocen que la situación de IU exige la apertura de un proceso constituyente o de refundación. Este proceso requiere una primera fase de clarificación ideológica, estratégica y programática que permita, en una segunda fase, abrir la posibilidad a la participación y a la incorporación de colectivos, partidos, grupos o personas de la izquierda plural existente en nuestro país y que consideran a IU un instrumento útil para la transformación de la sociedad.
4.-En el momento actual, en esta etapa del debate de IU, no debe ser prioritaria la elección de un coordinador/a general y de una dirección para los próximos tres-cuatro años. Los esquemas de lucha por el reparto de poder interno deben aparcarse. El esfuerzo radica ahora en conseguir una participación lo más activa posible de toda la base militante para relanzar a IU, para definirla y prepararla para el encuentro con la sociedad.
5.-Desgraciadamente, lo que hemos presenciado, y es responsabilidad de todos, es un proceso endogámico de articulación de listas y manifiestos por arriba, encabezado por los dirigentes de siempre, en la idea de “ganar” la batalla interna de la asamblea. Junto a ello, un proceso de carácter administrativo-burocrático, ligado a las cuotas y a las fichas de los censos, vinculado igualmente al esquema del reparto de poder interno.
6.-La mayoría de la militancia desear una solución compartida que saque a IU de la crisis estructural que tiene y la prepare para abrirse a la sociedad y generar capacidad de alternativas y de movilización social. El contexto de crisis económica y política general que vivimos lo demanda y nos hace objetivamente más necesarios. No podemos perder la oportunidad. La IX Asamblea debe ser un “espectáculo” de unidad y de apuestas claras por servir a los ciudadanos, por ofrecernos a ser instrumento de su participación. Unidad, pluralidad interna, participación social, instrumento para los trabajadores, para toda la ciudadanía.
7.-Para conseguir todo esto se hace imprescindible una reflexión por parte de todos los dirigentes implicados, coordinadores y responsables de todos los ámbitos territoriales e institucionales: Debemos plantear la Asamblea en clave de futuro y con visión sociopolítica y alternativa:
Antes de que sea demasiado tarde....
1.-Gaspar Llamazares ha manifestado su desconfianza en el proceso de la IX Asamblea, teniendo en cuenta las deficiencias habidas en la elaboración del censo de afiliados/as y la falta de consenso existente entre los miembros de la llamada “Comisión Unitaria”. Es decir, la falta de garantías democráticas básicas y el clima de confrontación que se vislumbra, anuncian una IX asamblea que no va a servir posiblemente para superar los problemas existentes...
2.-Todo ello, incluso admitiendo que los censos actuales aprobados han mejorado en su fiabilidad y que el trabajo de la Comisión Unitaria ha sido excelente hasta donde han permitido las circunstancias existentes.
3.-La mayoría de las propuestas, manifiestos o documentos que se presentan para el debate en esta IX asamblea, reconocen que la situación de IU exige la apertura de un proceso constituyente o de refundación. Este proceso requiere una primera fase de clarificación ideológica, estratégica y programática que permita, en una segunda fase, abrir la posibilidad a la participación y a la incorporación de colectivos, partidos, grupos o personas de la izquierda plural existente en nuestro país y que consideran a IU un instrumento útil para la transformación de la sociedad.
4.-En el momento actual, en esta etapa del debate de IU, no debe ser prioritaria la elección de un coordinador/a general y de una dirección para los próximos tres-cuatro años. Los esquemas de lucha por el reparto de poder interno deben aparcarse. El esfuerzo radica ahora en conseguir una participación lo más activa posible de toda la base militante para relanzar a IU, para definirla y prepararla para el encuentro con la sociedad.
5.-Desgraciadamente, lo que hemos presenciado, y es responsabilidad de todos, es un proceso endogámico de articulación de listas y manifiestos por arriba, encabezado por los dirigentes de siempre, en la idea de “ganar” la batalla interna de la asamblea. Junto a ello, un proceso de carácter administrativo-burocrático, ligado a las cuotas y a las fichas de los censos, vinculado igualmente al esquema del reparto de poder interno.
6.-La mayoría de la militancia desear una solución compartida que saque a IU de la crisis estructural que tiene y la prepare para abrirse a la sociedad y generar capacidad de alternativas y de movilización social. El contexto de crisis económica y política general que vivimos lo demanda y nos hace objetivamente más necesarios. No podemos perder la oportunidad. La IX Asamblea debe ser un “espectáculo” de unidad y de apuestas claras por servir a los ciudadanos, por ofrecernos a ser instrumento de su participación. Unidad, pluralidad interna, participación social, instrumento para los trabajadores, para toda la ciudadanía.
7.-Para conseguir todo esto se hace imprescindible una reflexión por parte de todos los dirigentes implicados, coordinadores y responsables de todos los ámbitos territoriales e institucionales: Debemos plantear la Asamblea en clave de futuro y con visión sociopolítica y alternativa:
- ESTA ASAMBLEA NO DEBIERA ELEGIR COORDINADOR/A GENERAL.
- EL OBJETIVO PRIORITARIO DE ESTA ASAMBLEA DEBIERA SER APROBAR LA ESTRATEGIA POLÍTICA, DE ALIANZAS Y PROGRAMATICA, LAS PROPUESTAS ANTE LA CRISIS ECONOMICA Y POLITICA DEL PAIS, ASI COMO LAS BASES PARA ABRIR UN NUEVO PERIODO CONSTITUYENTE O DE REFUNDACION DE IU.
- LA IX ASAMBLEA DEBIERA ELEGIR POR CONSENSO ENTRE TODOS/AS UNA COORDINADORA REPRESENTATIVA (QUE TENDRÍA UNA PORTAVOCÍA) CON LA ENCOMIENDA EXPRESA DE DIRIGIR ESTE PROCESO DE REFUNDACIÓN, CONVOCANDO A TODOS LOS SECTORES SOCIALES, GRUPOS, PARTIDOS, COLECTIVOS Y PERSONAS DE LA IZQUIERDA PLURAL, EN LA IDEA DE ELABORAR CONJUNTAMENTE UN ”PROGRAMA COMÚN”.
- ESTA TAREA DEBE HACERSE CONJUNTAMENTE CON EL PROCESO DE MOVILIZACION QUE IU HA DE IMPULSAR CONTRA LA CRISIS ECONÓMICA, POLÍTICA, SOCIAL Y CULTURAL EXISTENTE. Y HAN DE COMPROMETERSE EN SU DESARROLLO PLANIFICADO TODAS LAS ORGANIZACIONES TERRITORIALES, ASAMBLEAS LOCALES, PARLAMENTARIOS, ALCALDES Y CONCEJALES DE IU
- DEBE CULMINAR CON UNA REFUNDACION DE IU EN EL MÁS AMPLIO SENTIDO, EN UN PERIODO MÁXIMO DE UN AÑO. EL FRUTO DEBIERA SER UNA NUEVA ORGANIZACIÓN MÁS AMPLIA Y PLURAL, Y CON MÁS CAPACIDAD ALTERNATIVA.
4 de Agosto de 2008
Sebastián Martín Recio
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